Esta mañana en la Junta de Portavoces celebrada a las 14:00 horas, el Grupo Municipal de Nafarroa Bai ha presentado una propuesta para que el centro “aquavox” que se inaugura mañana tome el nombre Euskal-Jai en memoria del edificio original y de su historia
Itziar Gómez, responsable de Cultura del Grupo Municipal, justifica esta propuesta en la memoria y la historia del edificio:
“Queremos recordar que el Euskal-Jai fue un frontón de principios del siglo pasado con historia e importante actividad deportiva en el centro mismo de la ciudad. Que tras unos años cerrado fue ocupado como gaztetxe ofreciendo a la juventud en general y al barrio del Casco Viejo en particular, un espacio diferente, alternativo, abierto, ilusionante y participativo. Un espacio que recibió el apoyo ciudadano y la respuesta activa del barrio en el intento continuado de cierre y que finalmente fue desalogado y derribado ante la decisión de Yolanda Barcina y su grupo municipal en el 2004.
En recuerdo de lo que fue y de lo que quedó atrás queremos un guiño a su historia, un guiño a la actividad de un edificio que algunos pretenden obviar intencionadamente “
Itziar Gómez, responsable de Cultura del Grupo Municipal, justifica esta propuesta en la memoria y la historia del edificio:
“Queremos recordar que el Euskal-Jai fue un frontón de principios del siglo pasado con historia e importante actividad deportiva en el centro mismo de la ciudad. Que tras unos años cerrado fue ocupado como gaztetxe ofreciendo a la juventud en general y al barrio del Casco Viejo en particular, un espacio diferente, alternativo, abierto, ilusionante y participativo. Un espacio que recibió el apoyo ciudadano y la respuesta activa del barrio en el intento continuado de cierre y que finalmente fue desalogado y derribado ante la decisión de Yolanda Barcina y su grupo municipal en el 2004.
En recuerdo de lo que fue y de lo que quedó atrás queremos un guiño a su historia, un guiño a la actividad de un edificio que algunos pretenden obviar intencionadamente “
1 comentario:
Qué gran iniciativa.
Yo mismo de pequeño fui varias veces a ese frontón para ver cómo jugaba allí mi padre, que era remontista.
No hay más que leer las crónicas que por aquel entonces hacía el Diario de Navarra sobre las tardes que se vivían en ese frontón para darse cuenta de lo importante que fue para nuestra ciudad.
Lástima que no vayan a haceros ni caso.
Publicar un comentario