Si bien el comunicado de ETA en el que declaran un alto el fuego general, permanente y verificable es un hecho importante, debería ser el inicio del cumplimiento del Acuerdo de Gernika, puesto que la hoja de ruta para lograr la pacificación y la normalización política es el Acuerdo de Gernika.
En su comunicado, ETA menciona el Acuerdo de Gernika, pero no se reafirma en el mismo en su integridad. Es fundamental que ETA acepte y acate el Acuerdo de Gernika, incluída la unilaterialidad. Y unilateral significa sin contraprestaciones políticas. Esta es una cuestión pendiente en el comunicado y que deberá ser necesariamente subsanado para garantizar la credibilidad plena y eficacia completa de lo anunciado.
El único sujeto responsable de dar los pasos necesarios para que se de cumplimiento en su integridad a todos los puntos de Gernika son los agentes políticos y sociales de Euskal Herria. Es esta una competencia exclusiva de los agentes políticos y sociales que ha de ejercerse sin límites, sin tutelas y con el pueblo y la sociedad como único ente ante el que rendir cuentas.
Por su parte, la Declaración de Bruselas contiene los esfuerzos de la mediación internacional. Hay que agradecer, reconocer y valorar el esfuerzo e intervención de los mediadores internacionales, pues supone un recurso transcendental para que se cumplan todos los objetivos de pacificación y normalización contenidos en el Acuerdo de Gernika. Por eso, además de agradecerles hay que pideriles que continúen en sus esfuerzos hasta el definitivo logro de los objetivos contenidos tanto en la declaración de Bruselas como en el Acuerdo de Gernika.
Es hora de que todas las fuerzas políticas y sociales, ya sean firmantes del Acuerdo de Gernika o no, y de que todas las instituciones europeas y los Estados español y francés actúen a fin de que, fin de que se garantice la intervención política y la legalización de las fuerzas políticas y así mismo a fin de que se revisen profundamente las actuales políticas penitenciarias.
Es hora de que ETA abandone cualquier intención de intervención política, incluso en términos de impulso o esfuerzo. Tal actitud no podría ser aceptable democráticamente por la sociedad civil de Euskal Herria, ni por sus agentes políticos y sociales. Y, en este sentido, el último párrafo del comunicado, no es coherente con el resto del contenido del mismo.
Es hora de que la sociedad asuma el protagonismo que le corresponde en la nueva situación que se está creando en Euskal Herria. Es la voluntad de los ciudadanos y ciudadanas la que ha superado y superará todos los obstáculos y limitaciones para que se cumpla en su integridad lo acordado en Gernika.
Es hora de que todas las fuerzas políticas y sociales, ya sean firmantes del Acuerdo de Gernika o no, y de que todas las instituciones europeas y los Estados español y francés actúen a fin de que, fin de que se garantice la intervención política y la legalización de las fuerzas políticas y así mismo a fin de que se revisen profundamente las actuales políticas penitenciarias.
Es hora de que ETA abandone cualquier intención de intervención política, incluso en términos de impulso o esfuerzo. Tal actitud no podría ser aceptable democráticamente por la sociedad civil de Euskal Herria, ni por sus agentes políticos y sociales. Y, en este sentido, el último párrafo del comunicado, no es coherente con el resto del contenido del mismo.
Es hora de que la sociedad asuma el protagonismo que le corresponde en la nueva situación que se está creando en Euskal Herria. Es la voluntad de los ciudadanos y ciudadanas la que ha superado y superará todos los obstáculos y limitaciones para que se cumpla en su integridad lo acordado en Gernika.
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