Es por todos conocida la batalla teológico-publicitaria que se ha montado últimamente en las líneas de transporte público de determinadas ciudades. Mientras unos anuncian a golpe de cartel en bus urbanos la existencia de Dios, los otros no es que la nieguen rotundamente, sino que animan a disfrutar de la vida ante las razonables dudas de la existencia del altísimo.
Pues bien, tan apasionante tema de discusión aún no ha alcanzado a las antaño verdes lomeras de nuestras villavesas, mas, fruto de la revolución tecnológica que facilita el flujo de contenidos de carácter informativo, todas y todos hemos tenido noticia de la susodicha polémica. Hay que reconocer que como campaña de marketing no tiene desperdicio.
Tal vez por influencia de los autobuses ateos, parece que las Juventudes Navarras, capitaneadas por Sergio Sayas y Fermín Alonso, a respective Parlamentario Foral y Concejal de Pamplona, han venido a descubrir la pólvora y a asumir aquello que todos ya aceptamos como una cuestión normal (¿acaso no lo es?): que todas las formas de familia tienen cabida en nuestra sociedad. ¡Anda mira, y yo sin enterarme!. Es una cuestión sabida y demostrada por la historia que el Derecho siempre va muy por detrás de la sociedad. Pues bien, cuando el Derecho (que por cierto, no es todo lo adelantado que quisiéramos en cuestión de relaciones socio-familiares, por así denominar al tema en cuestión) tiene sobradamente reconocido el derecho al divorcio, al matrimonio entre personas del mismo sexo, a la adopción por madres solteras (o padre s solteros), icluso hasta la existencia de una forma legal de concubinato o convivencia extramarital, en las parejas de hecho, resulta que vienen los chicos y las chicas de Juventudes Navarras y nos venden como el paradigma de la postmodernidad una posición política en pos de que todas las formas de familia tengan cabida en la sociedad.
Lo curioso de la cuestión es que no ha transcurrido ni una semana desde el anuncio de Sayas, cuando su Secretario General (pido disculpas si me he equivocado, no controlo las correctas denominaciones de las cúpulas regionalistas), Fermin Alonso, a la sazón Concejal de esta gloriosa Ciudad, como canta la letra del Riau Riau, ha defendido la postura contraria de UPN a una moción presentada por el PSN y enmendada por Na Bai y ex ANV, en la que se proponían la adopción por parte del Ayuntamiento de la MN MH y ML de medidas encaminadas a formar e informar sobre la prevención ante los embarazos no deseados. La moción socialista se quedaba en informar a traves de una campaña del ministerio de sanidad, la enmienda de Na Bai iba más allá y pretendía facilitar cursos de formación a los jóvenes y a las jóvenas sobre sexualidad, sobre metodos de prevención de las infecciones de trasmisión sexual, sobre el uso del preservativo, sobre la interrupción voluntaria del embarazo, sobre la píldora del día después y, en general, con todo lo que tiene que ver con el yacer, el follar (con perdón) y el disfrutar de la vida desde el despertar de la sexualidad, cada vez a edades más tempranas según las estadísticas. Pues bien, ante esto, los modernos ediles y edilas regionalistas han votado en contra (por cierto, uniendo sus votos a los concejales de la ilegalizada ANV, fíjate tú que gran pecado). Aceptan las Juventudes Navarras que todos los tipos de familia tienen cabida en nuestra sociedad, pero rechazan informar, asesorar y formar a la juventud para que aprendan a mantener unas relaciones sexuales saludables. Se ve que al meditar esta decisión el influjo de los astros ha abogado porque UPN siguiera a la luz celestial de las villavesas creyentes.
Pues bien, este escribidor no sabe si el susodicho Dios existe o todo es un invento del TBO. No obstante, si que creo firmemente que independiente de todo ello deberíamos quedarnos con el verdadero mensaje que, en el fondo fondo pretenden transmitirnos todas las religiones monoteístas, politeístas e incluso la religión ateísta: vivir tranquilos y lo más felices que las circunstancias nos permitan, dejando al prójimo vivir igualmente tranquilo y feliz, sin joder la manta en demasía. Y sobre todo: amaos los unos a los otros, los otros a las unas. las unas a los otros y las otras a las unas. Pero usad protección, mesedez.
Pues bien, tan apasionante tema de discusión aún no ha alcanzado a las antaño verdes lomeras de nuestras villavesas, mas, fruto de la revolución tecnológica que facilita el flujo de contenidos de carácter informativo, todas y todos hemos tenido noticia de la susodicha polémica. Hay que reconocer que como campaña de marketing no tiene desperdicio.
Tal vez por influencia de los autobuses ateos, parece que las Juventudes Navarras, capitaneadas por Sergio Sayas y Fermín Alonso, a respective Parlamentario Foral y Concejal de Pamplona, han venido a descubrir la pólvora y a asumir aquello que todos ya aceptamos como una cuestión normal (¿acaso no lo es?): que todas las formas de familia tienen cabida en nuestra sociedad. ¡Anda mira, y yo sin enterarme!. Es una cuestión sabida y demostrada por la historia que el Derecho siempre va muy por detrás de la sociedad. Pues bien, cuando el Derecho (que por cierto, no es todo lo adelantado que quisiéramos en cuestión de relaciones socio-familiares, por así denominar al tema en cuestión) tiene sobradamente reconocido el derecho al divorcio, al matrimonio entre personas del mismo sexo, a la adopción por madres solteras (o padre s solteros), icluso hasta la existencia de una forma legal de concubinato o convivencia extramarital, en las parejas de hecho, resulta que vienen los chicos y las chicas de Juventudes Navarras y nos venden como el paradigma de la postmodernidad una posición política en pos de que todas las formas de familia tengan cabida en la sociedad.
Lo curioso de la cuestión es que no ha transcurrido ni una semana desde el anuncio de Sayas, cuando su Secretario General (pido disculpas si me he equivocado, no controlo las correctas denominaciones de las cúpulas regionalistas), Fermin Alonso, a la sazón Concejal de esta gloriosa Ciudad, como canta la letra del Riau Riau, ha defendido la postura contraria de UPN a una moción presentada por el PSN y enmendada por Na Bai y ex ANV, en la que se proponían la adopción por parte del Ayuntamiento de la MN MH y ML de medidas encaminadas a formar e informar sobre la prevención ante los embarazos no deseados. La moción socialista se quedaba en informar a traves de una campaña del ministerio de sanidad, la enmienda de Na Bai iba más allá y pretendía facilitar cursos de formación a los jóvenes y a las jóvenas sobre sexualidad, sobre metodos de prevención de las infecciones de trasmisión sexual, sobre el uso del preservativo, sobre la interrupción voluntaria del embarazo, sobre la píldora del día después y, en general, con todo lo que tiene que ver con el yacer, el follar (con perdón) y el disfrutar de la vida desde el despertar de la sexualidad, cada vez a edades más tempranas según las estadísticas. Pues bien, ante esto, los modernos ediles y edilas regionalistas han votado en contra (por cierto, uniendo sus votos a los concejales de la ilegalizada ANV, fíjate tú que gran pecado). Aceptan las Juventudes Navarras que todos los tipos de familia tienen cabida en nuestra sociedad, pero rechazan informar, asesorar y formar a la juventud para que aprendan a mantener unas relaciones sexuales saludables. Se ve que al meditar esta decisión el influjo de los astros ha abogado porque UPN siguiera a la luz celestial de las villavesas creyentes.
Pues bien, este escribidor no sabe si el susodicho Dios existe o todo es un invento del TBO. No obstante, si que creo firmemente que independiente de todo ello deberíamos quedarnos con el verdadero mensaje que, en el fondo fondo pretenden transmitirnos todas las religiones monoteístas, politeístas e incluso la religión ateísta: vivir tranquilos y lo más felices que las circunstancias nos permitan, dejando al prójimo vivir igualmente tranquilo y feliz, sin joder la manta en demasía. Y sobre todo: amaos los unos a los otros, los otros a las unas. las unas a los otros y las otras a las unas. Pero usad protección, mesedez.
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