20 años se han cumplido desde el primer insumiso. Bueno, desde el primer insumiso de "nuestra era", porque el primer insumiso de la historia fue el estadounidense Henry Thoreau, que se negó a ir a la guerra de México (1846-1848) por encontrarla una guerra sin sentido. Y lo hizo además tomando conciencia de lo sus actos. Sentó las bases de la desobediencia civil en un breve escrito, "Ensayo sobre la Desobediencia Civil". Por negarse a ir a la guerra, y a pagar los impuestos para sufragar los gastos del conflicto bélico, Henry Thoreau pasó sólo unos días en prisión (hay quien dice que pasó una sola noche). En contraste, 2 años, 4 meses y un día se tuvieron que tragar en el mako los insumisos. 2 años, 4 meses y 1 día, por negarse a tirar a la basura un tiempo de su vida haciendo un absurdo servicio militar. 2 años, 4 meses y 1 día en el talego fue el precio de luchar en contra de los ejércitos y en favor de la Paz. Su lucha ha sido y es ejemplar para toda la sociedad. Porque los insumisos consiguieron mucho más que acabar con la puta mili. Gracias a ellos la percepción social respecto de los ejércitos y de lo absurdo de las guerras ha cambiado. Demostraron que las causas más nobles se pueden conseguir usando fórmulas exlusivamente civiles y políticas. Los insumisos se plantaron delante de las metralletas y las Fuerzas Armadas con botes de pintura amarilla. Se plantaron ante los Jueces y ante el Código Penal anteponiendo al derecho su ideal de Justicia. Pusieron sus principio por delante y consiguieron cambiar la sociedad. 20 años de insumisión, por eso os digo ZORIONAK eta ESKERRIK ASKO. Eskerrik asko porque gracias a vosotros muchos nos libramos de la mili, pero sobre todo, porque conseguistéis cambiar la sociedad. Sin embargo, este 20º aniversario no puede ser un cierre. Este 20º aniversario de la insumisión no puede servir sólo para que los insumisos nos cuenten sus "batallitas de la mili". Tiene que ser un punto de partida, un revulsivo, porque el movimiento antimilitarista tiene mucho trabajo por delante. El pacifismo tiene mucha labor que hacer. La abolición de los ejércitos parece algo utópico, pero tammbién parecía una utopía conseguir acabar con el Servicio Militar Obligatorio y se consiguió. Por eso, ojalá este 20º aniversario nos sirva para tomar impulso en la lucha por la abolición de todos los ejércitos.
20 años se han cumplido desde el primer insumiso. Bueno, desde el primer insumiso de "nuestra era", porque el primer insumiso de la historia fue el estadounidense Henry Thoreau, que se negó a ir a la guerra de México (1846-1848) por encontrarla una guerra sin sentido. Y lo hizo además tomando conciencia de lo sus actos. Sentó las bases de la desobediencia civil en un breve escrito, "Ensayo sobre la Desobediencia Civil". Por negarse a ir a la guerra, y a pagar los impuestos para sufragar los gastos del conflicto bélico, Henry Thoreau pasó sólo unos días en prisión (hay quien dice que pasó una sola noche). En contraste, 2 años, 4 meses y un día se tuvieron que tragar en el mako los insumisos. 2 años, 4 meses y 1 día, por negarse a tirar a la basura un tiempo de su vida haciendo un absurdo servicio militar. 2 años, 4 meses y 1 día en el talego fue el precio de luchar en contra de los ejércitos y en favor de la Paz. Su lucha ha sido y es ejemplar para toda la sociedad. Porque los insumisos consiguieron mucho más que acabar con la puta mili. Gracias a ellos la percepció
n social respecto de los ejércitos y de lo absurdo de las guerras ha cambiado. Demostraron que las causas más nobles se pueden conseguir usando fórmulas exlusivamente civiles y políticas. Los insumisos se plantaron delante de las metralletas y las Fuerzas Armadas con botes de pintura amarilla. Se plantaron ante los Jueces y ante el Código Penal anteponiendo al derecho su ideal de Justicia. Pusieron sus principio por delante y consiguieron cambiar la sociedad. 20 años de insumisión, por eso os digo ZORIONAK eta ESKERRIK ASKO. Eskerrik asko porque gracias a vosotros muchos nos libramos de la mili, pero sobre todo, porque conseguistéis cambiar la sociedad. Sin embargo, este 20º aniversario no puede ser un cierre. Este 20º aniversario de la insumisión no puede servir sólo para que los insumisos nos cuenten sus "batallitas de la mili". Tiene que ser un punto de partida, un revulsivo, porque el movimiento antimilitarista tiene mucho trabajo por delante. El pacifismo tiene mucha labor que hacer. La abolición de los ejércitos parece algo utópico, pero tammbién parecía una utopía conseguir acabar con el Servicio Militar Obligatorio y se consiguió. Por eso, ojalá este 20º aniversario nos sirva para tomar impulso en la lucha por la abolición de todos los ejércitos.
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